Meghan Sims El verano está aquí, pero algunas noches siguen siendo frescas. Si decides adoptar un ambiente relajado y te dan miedo las corrientes de aire, seguro que te tapas los hombros con un jersey, pero principalmente con un cárdigan si quieres verte más formal.
La categoría de prendas de punto se compone de multitud de modelos, con o sin manga, con escote de pico, redondo o chal, con o sin abertura en la parte delantera.
Conociendo más del cárdigan
Uno de los más populares por su practicidad y carácter semiformal es el cárdigan. La historia de esta referencia es muy interesante y, como suele ocurrir en la moda masculina, difícil de verificar. Su invención se remonta a la Guerra de Crimea (1853-1856) y es obra de un oficial de caballería ligera británica, el mayor James Thomas Brudenell.
Este último, muy sensible a la elegancia, corta, se dice, su jersey con un corte de sable para ponérselo más fácilmente. El resultado causó sensación en las filas. La prenda resultante bien podría haberse llamado “brudenell”, pero el hombre era más conocido como el conde de Cardigan, llamado así por un pequeño pueblo de Gales. Como Lord Sandwich o Baron Raglan.
Aunque al final esta prenda lleve el nombre del conde de Cardigan, el inicio de su historia data de más atrás. En el siglo XVII, los pescadores británicos y franceses adoptaron esta prenda para mantenerse calientes en los fríos días de invierno en el mar. El cárdigan también era utilizado en Estados Unidos, y en 1865 el equipo de béisbol de la Universidad de Harvard añadió la letra «H» al frente de sus camisetas y el cardigan en “V”, también con letras, se convirtió en la indumentaria favorita en los campus de todo el país.
Coco Chanel revivió el interés en el cárdigan entre las mujeres durante la década de 1920. Una década más tarde, los cárdigans o suéteres para los hombres se hicieron muy populares tanto en la moda masculina americana como en el campo de golf.
Inicialmente hecho con materiales más duros como la lana, el cárdigan de una pieza generalmente tiene botones u otras piezas de sujeción en el frente. Estos botones ayudan a cerrar la parte delantera, ya sea desde la parte inferior a la superior o quizás solo hasta la mitad del torso, según el estilo y el corte del mismo. Algunos cárdigans también tienen cremalleras en lugar de botones que pueden ayudan a cerrar el frente de otra manera.
