3 motivos que provocan tener un cutis seco

Hombre humectando su rostro

Si eres el tipo de persona que por más que cuida su piel tiene problemas aquí te dejamos motivos que provoca un cutis seco.

Tu piel es el órgano vivo más grande de tu cuerpo; que actúa como una barrera entre las delicadas terminaciones nerviosas y las fuerzas externas, lo que lo hace increíblemente sensible a los cambios ambientales.

Motivos que provocan un cutis seco

  1. Deshidratación

¿El culpable de la piel deshidratada? Falta de agua. Sin una hidratación adecuada, la piel aparece opaca y hundida, lo que acentúa las líneas finas, las arrugas, los parches secos y las áreas de hiperpigmentación.

Tu solución : Bebe agua, lo que significa beber mucha agua durante el día y mantener tu cuerpo hidratado comiendo frutas y verduras frescas.

Manos hidratadas con crema

  1. Clima

Hay algunos factores en juego que causan estragos en nuestro cutis:

  • Bajos niveles de humedad. Cuando la temperatura desciende, los niveles de humedad también lo hacen. El aire seco deja la piel tirante y reseca.
  • Calefacción interior o Aire Acondicionado. Subir el calor o el aire acondicionado quita la piel de la humedad.
  • Clima ventoso y frío. El aire frío seca la piel a medida que el viento la deja seca, escamosa y agrietada.

Tu solución: invierte en un humidificador y configúralo en un nivel ideal de humedad del 45% al ​​55%. Lleva contigo bálsamo labial y crema para manos en todo momento (en el bolso, en el coche, en el trabajo) y asegúrate de no salir de casa sin hidratarte adecuadamente.

  1. Exposición al sol

La exposición prolongada a los peligrosos rayos ultravioleta también puede despojar a la piel de la humedad esencial: la piel se siente seca y tirante en el mejor de los casos, y quemada en el peor. Estás irritando tu piel y poniéndote en riesgo de foto envejecimiento y cáncer de piel.

Tu solución : ya conoce el procedimiento: protéjase con un humectante SPF de amplio espectro de la cabeza a los pies, asegurándose de no olvidar el cuello, el pecho, las manos y los pies (si están expuestos). Vuelva a aplicar con frecuencia mientras está fuera de casa.

Después del sol, rehidrate de la punta a los pies con un humectante altamente emoliente.

 

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