Consejos para aflojar la piel de tus zapatos

modelos de mocasin

Si usa zapatos que no sean de cuero, puede salir y comprar otro par cuando envejezcan demasiado. Sin embargo, cuando usa zapatos de cuero que se han endurecido después de años de uso, es hora de actuar.

El ablandamiento de los zapatos de cuero es una de las tareas de mantenimiento más comunes que realizan los proveedores de servicios profesionales de cuidado del calzado. Si desea evitar reparaciones o reemplazos frecuentes de calzado, es fundamental que sus zapatos de cuero sean lo suficientemente suaves para mantener su forma y evitar que se rompan. Puede suavizar sus zapatos de cuero de varias maneras, aquí hay algunas de ellas.

Empieza a usarlos poco a poco

Si sus zapatos de cuero simplemente se han vuelto duros porque han estado sentados por un tiempo, esto debería ser suficiente para usted. Simplemente comience a usarlos nuevamente, aunque sin pasar largas horas con ellos o caminar millas y millas con ellos todos los días. Es suficiente para usarlos dentro y fuera de la casa. Si puede sentir incluso un pequeño deslizamiento con cada paso en sus zapatos duros, ¡están listos para ablandarse!

Usar una pistola para secar pelo

Un secador de pelo es un dispositivo que se utiliza para soplar aire caliente sobre el cabello húmedo para secarlo. Este método con secador de pelo es bastante fácil de realizar y funciona fantásticamente bien. Aquí están los pasos:

Paso 1: Si los zapatos no son impermeables, colócalos entre dos cartones, para que no se mojen con el suelo húmedo. Luego, comienza a sacudir el zapato enérgicamente durante unos 30 segundos para que se drene todo el exceso de agua. También es posible que desee agregar un poco de arroz o arena para gatos en el interior si todavía gotea agua.

Paso 2: Tome una camilla para zapatos y sosténgala con una mano. Con la otra mano, comience a presionar la camilla en el zapato hacia abajo para que encaje perfectamente en su lugar. También puede usar un secador de pelo en lugar de una camilla para zapatos. En este paso, es posible que deba repetir el paso 1 si aún tiene agua en los zapatos del paso 1.

Paso 3: Ponte los zapatos y estíralos pisando los reposapiés. En este paso, no es necesario repetir el paso 2 ni aplicar ninguna fuerza, excepto tal vez una pequeña presión hacia arriba con el pie, dependiendo de qué tan apretado esté adentro. Tus zapatos deben salir fácilmente después de estirarlos por un corto tiempo.

Después de esto, tu zapato debería haberse vuelto muy suave. Para mantener la suavidad, debe quitar las correas todos los días y volver a colocarlas. Debe tratar de evitar apretar demasiado los pies porque el zapato se debilitará con demasiada presión.

pies con zapatos

Usar hormas para zapatos

Saber cómo suavizar los zapatos de gamuza o cuero puede ser útil para restaurar su forma y tamaño originales. Para este propósito, debe usar el estirador de zapatos correcto. Sin embargo, antes de hacerlo, asegúrese de leer detenidamente la etiqueta del producto. Le ayudará si sabe cómo usarlo correctamente. Por supuesto, hacer todos estos pasos dependerá de qué tan mal estén sus zapatos y en qué condición se encuentren. Si sus zapatos necesitan solo una pequeña restauración, entonces basta con engrasarlos o usar un aerosol para que vuelvan a estar en forma. Si sus zapatos necesitan mucho trabajo, intente todos estos pasos para lograr el resultado deseado de ellos. En última instancia, siempre que sepa cómo suavizar los zapatos de gamuza o cuero, podrá mantener su zapato con estilo y clase el mayor tiempo posible.

posando las botas

Caminar en tus zapatos

Caminar con los zapatos durante medio día puede parecer un poco más de trabajo, pero es la mejor manera de hacerlos sentir frescos y suaves. Usarlos nuevamente por solo medio día dos días después los hará más suaves nuevamente. Se paciente; Descubrirá que con el tiempo se vuelve más y más fácil mantener sus zapatos de cuero como nuevos. CONSEJO: Usar hormas en los zapatos cuando no los esté usando ayudará a mantener la forma y la frescura de los zapatos.

Artículos recomendados