Meghan Sims Obtener las vitaminas y minerales de los alimentos nutritivos es, obviamente, la mejor estrategia para estar saludables, pero saber la cantidad que contienen los alimentos suele ser difícil para el consumidor promedio. El contenido en nutrientes de los alimentos depende de tantos factores (calidad del suelo, condiciones de cultivo, métodos de almacenamiento, preparación de los alimentos, etc.) que tomar suplementos de vitaminas y minerales puede darte tranquilidad y ayudarte a evitar cualquier carencia. Sin embargo, los suplementos nutricionales se presentan en diversas formas, principalmente píldoras y líquidos, y tienen diferentes dosis y “vidas útiles”. Saber cómo comprar y conservar los suplementos vitamínicos y minerales puede ahorrarte una cantidad importante de dinero.
Duración de los suplementos vitamínicos líquidos
Las fechas de caducidad de los complementos vitamínicos no son las mismas que las de las etiquetas de los alimentos. Las fechas de caducidad de los alimentos están pensadas para evitar que se coman alimentos estropeados que puedan enfermar. En cambio, las fechas de caducidad de los suplementos vitamínicos “se supone” que dan una pauta de cuándo la potencia del suplemento “puede” empezar a disminuir. Sin embargo, por ley, los suplementos vitamínicos sin abrir y almacenados de la forma recomendada tienen que conservar toda su potencia durante al menos un año después de su fecha de caducidad.
En cuanto a los suplementos vitamínicos líquidos, las fechas de caducidad suelen ser de un año más o menos desde la compra, pero si no se abre el frasco, deberían durar al menos dos años. También depende del tipo de suplemento vitamínico líquido. Los frascos grandes de multivitaminas líquidas pueden perder su potencia más rápidamente que las cápsulas líquidas individuales de vitamina A, D o E, pero depende de si hay conservadores en el frasco. También depende de la rapidez con que se utilice el frasco.
Si compras grandes cantidades en oferta, probablemente sea mejor comprar las cápsulas líquidas porque puedes dividirlas en porciones más pequeñas y congelarlas, lo que puede alargar su vida útil. En general, las vitaminas liposolubles son susceptibles de estropearse y volverse rancias por la oxidación, mientras que las hidrosolubles suelen perder potencia mucho más lentamente.
¿Cuál es el mejor lugar para almacenar las vitaminas?
El mejor lugar para guardar las vitaminas de todo tipo es un frasco oscuro en el refrigerador. El calor, el oxígeno y la luz solar destruyen las vitaminas y reducen su potencia. La humedad también es un factor, por lo que hay que tener cuidado de no dejar la puerta del refrigerador abierta demasiado tiempo o el frasco de vitaminas sobre la barra de la cocina.
Si piensas aprovechar el buen fin para comprar una buena cantidad de vitaminas en rebaja, puedes guardar al menos seis meses en un armario oscuro y poner el resto en el congelador. Según las investigaciones realizadas sobre los alimentos, la vitamina C es la que más se ve afectada por la congelación y la vitamina E también puede verse algo afectada, aunque depende de si la fuente es natural o sintética.
Duración de los comprimidos vitamínicos
En general, las píldoras de vitaminas tienen fechas de caducidad más largas que las cápsulas o los líquidos, a menudo dos años más. Sin embargo, es importante tener en cuenta que las fechas de caducidad de las vitaminas y los minerales suelen estar más relacionadas con la venta del producto que con la garantía de su potencia. Poner una fecha de caducidad más corta en un frasco grande de vitaminas suele garantizar que se consumirá más rápido o se tirará poco después de la fecha, lo que a la larga genera más ventas. Las píldoras de vitaminas de cubierta dura contienen más aglutinantes y estabilizadores, que suelen durar mucho más, mientras que las cápsulas en polvo sin aditivos adicionales suelen tener una vida útil más corta.
¿Es mejor comprar vitaminas en pequeñas o en grandes cantidades?
Esto dependerá de tu bolsillo, pero probablemente sea mejor comprar vitaminas liposolubles en cápsulas o líquidas y no más de una provisión para 6 meses para asegurar la mayor potencia y frescura. En el caso de las vitaminas hidrosolubles, considera la posibilidad de comprar polvo en cápsulas con el menor número de aditivos, y puedes comprar con seguridad hasta con un año de antelación.
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