Meghan Sims “La inteligencia emocional es parte del liderazgo. Es parte de la comunicación”.
Eso dice el Dr. Joe Mayer, profesor titular de la Escuela de Ingeniería. Enseña Liderazgo y Habilidades Interpersonales, con el objetivo de desarrollar líderes que motiven e inspiren a otros a trabajar en equipo al servicio de metas compartidas.
Su enfoque en la educación de la inteligencia emocional puede enfrentar resistencia en un campo conocido por sus practicantes introvertidos, pero el Dr. Mayer no se deja intimidar.
“Creo firmemente”, dice, “que los estudiantes aprenden mucho hablando entre ellos, intercambiando ideas, escuchándose, tal vez viendo diferentes puntos de vista y desafiando su propio pensamiento”.
Aceptando el desafío
Como hacen los mejores maestros, el Dr. Mayer tiene un profundo respeto por sus estudiantes y reconoce los rasgos y desafíos que muchos de ellos comparten.
“Los científicos, incluidos los ingenieros, no son conocidos por ser las personas más extrovertidas”, señala. “Y los introvertidos normalmente son muy, muy mesurados en la forma en que nos involucramos en la comunicación. Necesitamos nuestros hechos. Tenemos que pensar en los problemas antes de dar nuestra opinión. Así que la comunicación, la importancia de la comunicación, la forma en que nos acercamos y formamos redes y la confianza en ellas son cuestiones realmente clave para los científicos “.
Al priorizar las habilidades de comunicación, el Dr. Mayer comprende que está llevando a sus estudiantes a un viaje que podría resultarles incómodo.
“Si miras algo basado en la ciencia, calculas y solo hay una respuesta verdadera. Si miras el desarrollo personal, todos somos diferentes. La respuesta puede parecer completamente diferente para cada estudiante, y es muy importante aceptar eso, ser concienzudo y dedicar tiempo a desafiar las propias creencias, específicamente para las personas a las que les puede gustar el mundo más blanco y negro que gris “.
Educación en inteligencia emocional
“Si somos líderes auténticos, tenemos que ser auténticos en un estilo que realmente atraiga a nuestros seguidores”, afirma el Dr. Mayer. “Y solo podemos hacer eso si tenemos mucha inteligencia emocional“.
Las personas que no son conscientes de sus propios sentimientos y / o no pueden manejarlos de manera efectiva a menudo se consideran impredecibles, un rasgo muy poco atractivo en el mundo profesional. Además, a quienes no comprenden bien sus propios sentimientos les resulta muy difícil ver y reconocer las emociones de los demás. Como ejemplos, planteó estas preguntas:
- ¿Cómo mostrarías empatía a alguien si no ves que esa persona no es su yo habitual esta mañana?
- ¿Por qué estarías interesado en alguien, para construir una relación cercana, para aprender sobre esa persona, cuando estás tan concentrado en ti mismo?
- “Lo bueno”, continúa, “es que la inteligencia emocional es una habilidad. De hecho, podemos enseñar esa habilidad; podemos practicar y mejorar en eso “.
La creciente demanda de trabajo en equipo y liderazgo
Cuando el Dr. Mayer se inició en la ingeniería, se consideraba que los ingenieros eran extremadamente técnicos. Trabajaron en oficinas a puerta cerrada. Cualquiera que necesite una pregunta respondida, esencialmente, la deslizaría debajo de la puerta y esperaría a que la respuesta regresara de la misma manera.
“A medida que pasaba el tiempo y nuestro entorno empresarial se volvía tan competitivo”, dice, “las empresas han tenido que confiar en el ingenio de más de una persona. Una persona no puede tener todas las respuestas “.
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Como resultado, las empresas dependen cada vez más del trabajo en equipo. “Todo se hace en equipos. Escuchamos diferentes perspectivas. Escuchamos, con suerte, a un grupo de compañeros de equipo significativamente diverso, y juntos podemos encontrar una idea que sea mejor que cualquier cosa en la que alguien haya pensado antes “.
“Esto significa”, aclara, “que todos los miembros de un equipo hoy en día deben ser líderes. Porque tan pronto como tienes la pelota, tan pronto como te hacen la pregunta, es cuando eres el líder. Ahora puede dirigir la pregunta, responderla, proporcionar información de fondo y luego volver a ser seguidores a medida que se transmite la pregunta”.
El don de la diversidad
El Dr. Mayer valora el cambio y la oportunidad que se hacen posibles al abordar los problemas desde una variedad de perspectivas. Las discusiones se vuelven “mucho más interesantes y filosóficas” de lo que serían si todos tuvieran el mismo punto de vista.
“Al agregar a alguien que piensa de manera diferente, tiene diferentes prioridades, un trasfondo diferente, diferentes experiencias, ahora tenemos algo que podemos intercambiar. Podemos aprender unos de otros y desarrollarnos de manera diferente. Y de eso se tratan los buenos equipos “.
Enseñanza de liderazgo y habilidades interpersonales
“En la clase de Liderazgo y Habilidades Interpersonales”, comparte, “creemos que la efectividad y el éxito de una persona están directamente relacionados con la forma en que la persona trabaja con los demás: qué tan bien esa persona lidera a otros, inspira a otros y qué tan bien esa persona es un seguidor , en un contexto más amplio, de otros. Así que realmente necesitamos que las personas comprendan dónde se encuentran sus fortalezas de liderazgo, qué inspiran, cuál debería ser su estilo de liderazgo, y luego cerrar la brecha entre dónde están y adónde quieren ir “.
- ¿Cómo quieren que los demás vean su estilo de liderazgo?
- ¿Cuál es su yo ideal?
- ¿Qué quieren lograr?
- ¿Cuáles son sus valores?
- ¿Cómo pueden utilizar esos valores para llegar a la imagen ideal de sí mismos?
“Basándonos en esos dos, los llamamos el liderazgo real / yo real y el liderazgo ideal / yo ideal, entonces podemos ver cómo podemos pasar de uno a otro”, explica el Dr. Mayer. “¿Qué tipo de metas deberíamos fijarnos? ¿Qué tipo de medidas podemos tomar para cerrar esa brecha? ¿Qué tipo de habilidades necesitamos desarrollar para alcanzar lo que nos hemos propuesto en nuestros escenarios ideales?”.
